Lo Mejor de 2017 en Cine
Premiación lunes 8 de enero de 2018
Premio a la Mejor Película Extranjera de 2017: The Square, del realizador sueco Ruben Östlund
Por su audaz y apasionante realización, este filme nos plantea profundos dilemas de lo que entendemos por Arte hoy día, a la vez que cuestiona las impolutas y correctas sociedades del Primer Mundo, y de cómo condicionan las relaciones en nuestra sociedad actual.
Premio a la Mejor Película Chilena de 2017: para Una Mujer Fantástica
Esta cinta honesta aborda con coraje y belleza una temática que no es sencilla. Tiene múltiples capas por las que transitan los protagonistas y también los espectadores. El lenguaje visual de Sebastián Lelio posee finas texturas, colores particulares, planos especiales y una convicción precisa de lo que significa el mundo femenino. No se trata solo de poner encima de la mesa un tema que por años ha sido tabú, ocultado, ignorado, desechado o tal vez solo de una reivindicación de género de connotación social. La producción va más allá. Cuestiona con hechos, violenta con lenguaje, empatiza con acciones y profundiza con emociones.
Premio 2017 al Mejor Actor Chileno: Nicolás Durán, protagonista de “Jesús”, de Fernando Guzzoni
Enfrentado a un rol complejo, demandante y profundamente dramático, este joven actor chileno fue capaz de transmitir Verdad y Emoción, dando vida a un personaje sumergido en un mundo turbulento, cruel y carente de valores.
Premio al Mejor Documental 2017: “El Color del Camaleón” de Andres Lubbert
En un acto valiente y urgente a la vez, el realizador va tras las huellas de su padre, un ser nebuloso y lejano para él, y juntos emprenden una travesía dolorosa y necesaria para ambos, que es también descorrer el velo de parte de nuestra historia reciente, desde la vereda más íntima.
Premio al Mejor Documental Ópera Prima de 2017: “El pacto de Adriana” de Lissette Orozco
Con este trabajo comprometido y desgarrador para la propia realizadora, Lissette Orozco toma de la mano al espectador y junto a él va descubriendo una oscura verdad que se ha agazapado en su propio hogar. Con no poco dolor asistimos, junto a ella, a la constatación de que lo que creíamos y amábamos no era tal, que los monstruos a los que tanto tememos también están en nuestra casa. Porque la historia de una familia siempre estará indisolublemente ligada a la historia de su país y muchas veces desde los lados menos luminosos.
