Música
05 de Julio, 2023

¡Bienvenida a casa, maestra…!

Por Jaime Torres Gómez

Coincidiendo con los 25 años de vinculación de la maestra brasileña Ligia Amadio con Chile, luego de ganar “La Selección de Directores para las Américas”, organizado por la Sinfónica Nacional, retornó para dos programas junto a la decana sinfónica del país.

La figura de Ligia Amadio es de gran gravitación en el panorama de la dirección de orquesta latinoamericano, tanto por su solvente formación, consumada musicalidad y carisma. En su carrera ha sido titular de orquestas en su país, Argentina, Uruguay y Colombia, estando a cargo actualmente de la Sinfónica de Minas Gerais.

La relación de Ligia con Chile ha tenido períodos de alta periodicidad como a la vez de una larga e injusta ausencia por más de 10 años... , aunque felizmente revertida después, y manteniendo hasta ahora buena periodicidad como invitada.

En esta re-aparición con la Sinfónica Nacional, lo hizo en dos programas, de los cuales se asistió a la mitad del primero (por coincidencias de horario con otros conciertos) y al de la semana siguiente, corroborando otra vez la solvencia artística de esta insustituible maestra "de la casa"...

De lo presenciado en el primer programa, del todo idiomáticos los enfoques globales de las contrastantes piezas francesas dispuestas (programa monográfco de compositores galos), destacándose una impresionante versión de la Pavana, op 50 de Gabriel Fauré, con el plus de haberse ofrecido en su versión con coro.

Encomiable el “decir” de la interpretación, con la sonoridad esfumada propia de un pre-impresionista como Fauré. Gran amalgama de las cuerdas y transparencias en todas las filas. Y lo mismo en el Cántico de Jean Racine, del mismo Fauré, con buena intervención de la Camerata Vocal de la Universidad de Chile.  

Posteriormente, con radical giro de carácter, una robusta versión del Salmo 150 de Cesar Franck, con fuerte protagonismo de la masa coral. Excelente balance coro-orquesta, más un buen control de las intensidades, sin caer en cierta prosopopeya ante el carácter de la obra (de solemne ímpetu). Y una atrapante versión del Aprendiz del Hechicero, de Paul Dukas, frecuente en la Sinfónica, ofreciéndose una analítica lectura con calibrada explotación tímbrica y colorística, obteniendo lo mejor de los decanos sinfónicos.

A la semana siguiente, un triunfal programa Rachmaninoff, como parte del hito de los 150 años de su nacimiento. Y dada la popularidad de este compositor ruso (quizás, el último romántico…), ineludible sustraerse a tal conmemoración, contemplándose su Vocalise junto a la Segunda Sinfonía, esperándose, en el caso de la Sinfónica Nacional, se programen más de sus obras a lo largo del año, al no conocerse toda la programación 2023 (anuncios bimensuales, en promedio)…

En el caso de la Vocalise, obra originalmente escrita para voz de tesitura alta con piano, el compositor realizó varias adaptaciones, siendo la versión para orquesta sola la presentada en esta oportunidad (al parecer, estreno local en tal formato). Excelente enfoque de la maestra Amadio, con celebrada visión del todo, certeras inflexiones, matices y transparencias. Cohesionada respuesta de los sinfónicos, destacándose muy especialmente los solos del clarinete y corno inglés.  

Y como obra de fondo, una gran versión de la Segunda  rachmaninoffiana… obra de genuino espíritu romántico (herencia directa de los grandes rusos románticos), de sólida construcción formal y acabado oficio de orquestación. De directo encanto, su trama transita desde lo nostálgico a lo exultante, servido de atrapantes armonías y con notables dosificaciones en las transiciones temáticas. 

Estos elementos estuvieron magistralmente reflejados en la lectura de Ligia Amadio, comprendiendo a cabalidad su pathos interno. Gran respuesta de los sinfónicos nacionales ante tan carismáticos requerimientos, demostrando nuevamente el excelente nivel que hoy en día se encuentra la decana orquestal chilena.  

En suma, dos presentaciones de una batuta latinoamericana fundamental como Ligia Amadio, esperándose seguir contando con su colaboración por estas latitudes…