Teatro
08 de Septiembre, 2020

“Camarín de Mujeres”, una obra que hay que ver

Por César Sepúlveda Vilches

Desde el 16 de agosto y hasta el 16 de septiembre la Compañía de Danza Teatro Butoh “Bayku” está presentando la obra “Camarín de Mujeres”, escrita y dirigida por Andrés Gutiérrez y estrenada el 2019 en forma presencial. Hoy, debido a la contingencia mundial, regresa en formato digital, bajo la consigna “Radio, Danza Performática”.

Y bien, debido a que esta es la única dimensión que actualmente las compañías de danza tienen como soporte para existir o visualizar su trabajo artístico, producto de la pandemia mundial que hoy se vive y que nos impide vivenciar la escena desde el soporte presencial y base de una obra escénica, podemos decir que la pieza logró un verdadero acierto.

Habrá que acostumbrase a este formato audiovisual en lo escénico, tanto los creadores, como nosotros los asiduos a la escena de danza. Sin embargo, creo que este momento o dimensión ha obligado a los coreógrafos a introducirse a un nuevo medio que bien puede ser un gran soporte a futuro, sea como alternativa a espacios de visualización y existencia, así como servir a la generación de registros que aportaría en una posterior valoración de nuestro patrimonio artístico en el área de la danza y que, de seguro, no es una idea normalizada por nuestros exponentes nacionales.

Refriéndonos exclusivamente a lo que hoy vemos en pantalla, específicamente a “Camarín de Mujeres”, se puede catalogar como una buena apuesta o simplemente, una pieza de danza bien lograda. Entendiendo que las artes escénicas no están hechas o pensadas para este formato video de danza, y menos en una obra que tuvo que adaptarse a este medio, aún así Andrés Gutiérrez dio a luz una obra excepcional.

Si bien este domingo 6 de septiembre la obra, que tiene una duración de 25 minutos aproximados, partió con 8 minutos de retraso, esos minutos no fueron molestos debido a que la música de espera antes de la transmisión fue bien premeditada, ayudándonos a olvidar nuestro claustro doméstico y enfocándonos en la obra una vez iniciada, abandonando nuestros menesteres de confinamiento.

La pieza esta propuesta en 4 cuadros bien definidos, tanto en su coloratura de imagen, que van desde el blanco y negro al color -cabe decir que hay un tratamiento muy marcado en cada cuadro en la edición de video- como en la pausa o inicio de escena de cada cuadro, lo que facilita su comprensión y cambio de estado, logrando cercanía y riqueza dentro de la obra.

La producción audiovisual cuenta con el acertado trabajo de Diego Darat, quien sin ser conocido en las artes escénicas, consigue dar el tiempo adecuado a cada cuadro, matices, profundidad en las imágenes y superposición de ellas, logrando bellos pasajes en la pieza y demostrando un absoluto entendimiento sobre lo que es la damaturga escénica en este nuevo formato.

Tal vez, uno de los errores de la obra, fue la utilización de sonidos característicos de nuestra etnia mapuche que están presentes en algunos de los cuadros, que probablemente debido a la contingencia de hoy y en relación con la actualidad nacional, nos evoca al conflicto mapuche, provocando que nos extraigan o desencajen de la idea central de “Camarín de Mujeres”. Mujeres que sufrieron el castigo inhumano y deplorable por parte del estado en el periodo de 1973, torturadas, menospreciadas y agredidas. La utilización de estos sonidos nos traslada a otra zona geográfica, es decir desde el Estadio Nacional, epicentro del conflicto, a una región de crisis como la Araucanía. Quizás fue propuesto como un guiño a la causa en relación con la contingencia, pero se transforma en una señal que descuida el foco, por la relevancia de su temática central y escénica.

El elenco interpretativo está compuesto por Katherine Cid, Macarena Álvarez, Nathaly Zúñiga, Valentina Beas y Vania Muñoz. Por su parte,  la producción de sonidos es de Luis Concha Escobar.

En resumen: es una buena obra de danza, teatro performativo, y una de las primeras que se presenta en este formato audiovisual de mayor duración, además de lo que se presentó hasta el 31 de agosto como parte de Santiago a Mil, en su ciclo “Danza Hoy”, con obras de pequeño formato.

Antecedentes relevantes:

Últimas funciones: miércoles 9 y 16 de sept. - 20:30 horas y domingo 13 de sept. - 19:00 horas.

Eventos en www.toliv.io/bayku 

Valor: $3.000